Cada temporada, las tendencias en moda infantil cambian, pero hay ciertos elementos que siempre siguen siendo populares. Este año, los tonos pastel
y los colores tierra se han convertido en los favoritos, ofreciendo una alternativa más suave y natural a los colores brillantes. Los estampados divertidos,
como los animales y los patrones geométricos, continúan siendo una elección popular, brindando un toque lúdico y creativo a los
conjuntos de los más pequeños.
A medida que los niños comienzan a tener sus propias preferencias, muchos optan por piezas que reflejan sus gustos personales. Las camisetas
con personajes favoritos, los vestidos con detalles únicos y las chaquetas con motivos divertidos son opciones que no solo siguen las tendencias,
sino que también permiten que los niños se sientan identificados con su ropa. Las opciones son infinitas, y la moda infantil se adapta cada vez más
a la individualidad de cada niño, permitiendo que se expresen con lo que llevan puesto.